El Día Mundial del Asma se conmemora el primer martes de mayo de cada año, fue celebrado por primera vez el 5 de mayo de 1998, en el marco de la primera Reunión Mundial sobre el Asma efectuada en Barcelona, España.
Se trata de uno de los eventos de educación y concienciación sobre el asma más importante del mundo.
El objetivo es involucrar a los pacientes con la atención y control del asma, reducir los posibles factores de riesgo y enseñar a las personas que se debe hacer ante un posible ataque o crisis de esta enfermedad.
Generalmente las personas que sufren esta enfermedad son más vulnerables a factores externos como el clima, el polvo, el humo y sustancias químicas, los cuales pueden fácilmente desencadenar un brote de asma.
El asma es considerado como un padecimiento crónico, que genera una serie de síntomas que pueden variar de acuerdo a la frecuencia, duración e intensidad: