El contrato que generó las recientes quejas del presidente Luis Abinader sobre el “incumplimiento” por parte de la farmacéutica Astrazeneca, en la compra de vacunas contra el Covid-19, contiene cláusulas que, al aceptarlas el gobierno en 2020, ahora le atan de manos para tener éxito en un arbitraje internacional.
Y no solo el Gobierno dominicano, ya que el contrato fue aprobado por el Congreso Nacional sin ningún tipo de oposición por parte de los legisladores. Continuar leyendo.