Un nuevo episodio de violencia machista ha inundado las redes sociales de medio mundo pocos días después de hacerse pública la grabación de una cafetería en París en la que un hombre propinaba un puñetazo a una joven tras exigirle que dejara de increparla. Las calles de la capital francesa han dado paso ahora a las del condado de Essex, al oeste de Londres, donde una joven británica de 18 años ha sido víctima de una brutal agresión a la salida de un club de fiesta. Los hechos tuvieron lugar en torno a las 3.00 de la madrugada del pasado sábado 28 de julio, a la entrada de la discoteca Face, en Grants Hill. Según ha contado la víctima al diario inglés The Sun, el agresor se encontraba con otro amigo en la calle amenazando a un grupo de chicas con golpearlas. Fue entonces cuando la joven se dirigió a él para pedirle que cesara en su actitud: "Le dije que estaba equivocado y que tenía que irse y ser un caballero.

Entonces me pegó y permanecí desmayada durante cinco minutos a causa del impacto". Otro de los presentes durante el suceso ha contado al mismo diario que el agresor pidió el número de teléfono a la joven y que, tras la negativa de ésta, reaccionó de forma desproporcionada. A este respecto, la víctima ha señalado que el hombre "se puso agresivo y faltón" cuando se negó a darle su número. "Fat cunt" fue el insulto más grosero que escucharon los testigos por parte del agresor.El hombre ha sido identificado por Scotland Yard con el nombre de Liam Holmes, de 20 años de edad, y ya ha sido puesto a disposición judicial imputado por un delito de daños físicos, según ha informado el MailOnline a través de la Policía Metropolitana. En el vídeo de nueve segundos difundido por los medios se puede ver a la víctima acercarse a pocos centímetros de Holmes, que permanece con las manos cruzadas. La pareja intercambia palabras inaudibles antes de que él la golpee en la cara con el puño derecho dos veces.

En la grabación también se escucha a los testigos de la agresión decir "Dios mío" y gritar en estado de shock mientras la cámara graba una imagen de la joven inmóvil boca arriba en el suelo. Poco después, la víctima fue trasladada al hospital para recibir atención médica debido a los cortes que presentaba en la boca y ya ha sido dada de alta. Tras la difusión de las imágenes, el propio Holmes decidió acudir de forma voluntaria a la comisaría de policía más cercana para presentarse ante las autoridades, tras lo cual quedó en libertad pendiente de juicio. La madre del agresor, Cathy Holmes, de 53 años y ex propietaria de una floristería, ha salido en su defensa afirmando que la joven "provocó" la agresión: "La gente juzgará a Liam sólo por el vídeo, pero él no es así y lo que se ha visto es sólo una parte de la historia real", afirmó, añadiendo que su hijo había cuidado de ella cuando sufrió una hemorragia cerebral hacía algún tiempo. "Creo que hablo en nombre de todas las mujeres jóvenes cuando digo que es indignante que podamos enfrentarnos a semejante amenaza simplemente por decirle a alguien que no", ha declarado la adolescente, consciente de lo virales que se han convertido las imágenes de su incidente en medio mundo.

fuente: ElMundo.es