Una nueva victoria se anotaron los restaurantes en Nueva York: ahora la legalizada opción de ‘tragos para llevar’ exige que los clientes compren “comida sustancial”, a diferencia de la primera versión que permitía sólo pedir platos ligeros, como tapas, entradas o bocadillos.
Como parte del presupuesto estatal de $220 mil millones aprobado el jueves, el nuevo capítulo del programa “alcohol para llevar” creado por el ex gobernador Andrew Cuomo y respaldado por su sucesora Kathy Hochul entró en vigencia de inmediato y durará hasta abril de 2025.
La regulación permite a los neoyorquinos pedir “para llevar” cócteles y cerveza en bares y restaurantes, siempre y cuando la compra sea acompañada de comida “sustancial”. Continuar leyendo.